Diferencias entre odontología y odontopediatría

La odontopediatría, como su nombre lo indica, es la especialidad odontológica que atiende la salud bucal de los niños y adolescentes.
El odontopediatra es un especialista que primero debe ser odontólogo general y después se especializa en las necesidades dentales de la infancia.
A continuación, te informamos un poco sobre las diferencias entre la odontología y la odontopediatría, para que sepas por qué esta última es tan importante.
¿Por qué es necesaria la odontopediatría?
Como en todas las profesiones, la especialización en el caso de la odontología surge de manera histórica, en la medida en que se detectan necesidades especiales y existe un grupo de profesionales que se dedica a estudiar cómo resolverlas de la mejor manera.
En el caso de la odontopediatría, muchos odontólogos generales fueron conscientes de que el trato con los más pequeños de la casa era distinto. Se requiere de una sensibilidad especial para tratar con ellos. Además tienen diferentes necesidades a lo largo de la infancia.
Los odontopediatras reciben una formación específica en lo relacionado con la primera dentición que se da en los primeros seis a siete meses de vida.
Durante este momento es importante saber detectar anomalías tempranas para corregirlas a tiempo, y también saber orientar a los padres en cuanto a los hábitos correctos para preservar la dentadura de sus hijos.
Alrededor de los seis a siete años, los niños comienzan el cambio de los llamados dientes de leche por los dientes permanentes. En ese momento es importante atender la higiene bucal y en algunos casos ayudarlos para que esta transición sea lo menos dolorosa y traumática posible.
Por estas razones, el odontopediatra no solo se forma en los aspectos específicos de la higiene, la anatomía y fisiología de los dientes en los niños. También se ocupa de la vigilancia de los procesos de dentición y los hábitos correctos para la preservación de la dentadura.
Para tener las herramientas para tratar con los niños, los odontopediatras reciben en su formación, conocimientos en psicología infantil y así aprenden técnicas para abordar los temores de los niños y darles seguridad para que sientan confianza hacia su odontólogo.
Este último aspecto es muy importante, así se evitan traumas infantiles relacionados con la consulta dental. Ésto ayudará a que tus hijos al crecer no sean personas temerosas de acudir a la clínica odontológica y ocuparse de su salud bucal.
Cuando acudir al odontólogo general o al odontopediatra
En cualquier caso, se recomienda que todas las personas acudamos por lo menos una vez al año para hacernos una revisión general de nuestra salud oral.
Si nos referimos a los niños, es preferible que durante los primeros catorce años de vida asistan a una revisión general al año con un odontopediatra. En caso de que no se disponga de uno con facilidad se debe asistir al odontólogo general.
Es conveniente detectar y tratar anomalías en el proceso de dentición. Así se puede recibir la orientación adecuada en temas como la higiene bucal de los bebés. El uso de biberones y aspectos de nutrición relacionados con la dentición, hacen que lo más recomendable es que asistas a la consulta del odontopediatra.